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Patio de un parador, Elena Brockmann de Llanos

Patio de un parador, Elena Brockmann de Llanos

Las salas de Bellas Artes del Museo San Telmo incorporan el cuadro Patio de un parador, de Elena Brockmann de Llanos (Madrid, 1865-1946). Se trata de un cuadro de grandes dimensiones (151x300cm.), que el Museo del Prado depositó en el Museo San Telmo en el año 1901, antes incluso de su inauguración oficial.

marzo de 2022 - marzo de 2023
De martes a domingo, 10:00 - 20:00
Salas de Bellas Artes, sección siglo XIX
Visita: con la entrada del museo
Para concertar una visita guiada a la exposición temporal:
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943 48 15 61 (de lunes a viernes, 12:00-14:00)

Patio de un parador

Patio de un parador, Elena Brockmann de Llanos (Madrid, 1865-1946)
Dimensiones: 151 x 300 cm.
Depósito del Museo del Prado en 1901
Primera obra pintada por una artisa mujer en las colecciones de San Telmo
La obra ha sido restaurada y junto a ella se exhibe el vídeo del proceso
Junto al cuadro se presenta una tabla en la que se puede ver a la artista trabajando

PATIO DE UN PARADOR fue depositada en 1901 por el Museo del Prado junto a otras 5. Fue de las primeras obras en ingresar en el museo, y la primera de una artista mujer.

Junto a Patio de un parador se presenta una tabla de autoría anónima (que nunca antes ha sido expuesta) en la que se puede ver a la artista trabajando en su obra Paso de una procesión por el claustro de San Juan de los Reyes, Toledo en su taller, rodeada de sus útiles de trabajo.

El proceso de restauración ha sido realizado en colaboración entre el equipo del Museo San Telmo y Lucía Martínez Valverde, especialista en pintura del siglo XIX del Museo del Prado. Los trabajos se han realizado en Gordailua, donde el cuadro se encontraba almacenado desde 2011. Desde 1901 hasta entonces, el cuadro había permanecido custodiado en los almacenes del Museo San Telmo, y había sido expuesto tan sólo en una ocasión. El análisis realizado en estos últimos meses en Gordailua y el proceso de restauración han sido recogidos un un vídeo expuesto junto a la obra.

El cuadro ha sido restaurado para su exhibición con motivo de la exposición Baginen Bagara. La exposición Baginen Bagara. Artistas mujeres: lógicas de la (in)visibilidad aborda, a través de las colecciones del Museo San Telmo y la Diputación Foral de Gipuzkoa, las estrategias que el sistema del arte ha utilizado desde el siglo XIX para marginar a las artistas. En el proyecto inicial estaba también incluida la obra Patio de un parador, si bien finalmente se desestimó debido a su gran tamaño. No obstante, la calidad de la obra y su historia, tan ligada a la del museo, han hecho que se busque una manera de incluirla en el proyecto, en un nuevo escenario, y con un mayor tiempo de exposición.

Patio de un parador Tabla Elena Brockmann

Elena Brockmann de Llanos, 120 años en el Museo San Telmo

Las donaciones de artistas y particulares así como los depósitos de varias instituciones resultaron fundamentales en la gestación del museo municipal de San Sebastián (hoy Museo San Telmo ). En sus primeros años de andadura el museo contó especialmente con la colaboración del Museo del Prado, que en 1901 dejó en depósito 5 obras de gran interés (Real Orden de 3 de agosto de 1901), entre las cuales estaba Patio de un parador, de Elena Brockmann de Llanos. Se trata de una de las primeras obras que ingresa en el museo y la primera pintada por una mujer, circunstancias que la convierten en especial.

Brockmann presentó esta obra en la Exposición Nacional de 1887, y aunque no fue premiada puesto que lo impedía el reglamento, consiguió venderla al Estado en 1894 y pasó a formar parte de las colecciones del Museo Nacional del Prado.

esta obra (...) recoge y sintetiza en toda su dimensión la discriminación social y las dificultades que encontraron las mujeres en sus trayectorias artísticas

Esta obra de grandes dimensiones, contemporánea a la apertura del Museo San Telmo y custodiada por éste a lo largo de 120 años, recoge y sintetiza en toda su dimensión la discriminación social y las dificultades que encontraron las mujeres en sus trayectorias artísticas. Al igual que otras muchas mujeres, Brockmann recibió premios y reconocimiento entre los pintores de su época por su talento y calidad artística, pero siempre fue considerada una artista menor.