Cruz en la que se muestran los extremos frontales al natural.
La iglesia del Buen Pastor, con motivo del centenario de su inauguración, encargó a Eduardo Chillida una pieza que fuera un signo de los tiempos actuales. El autor, tras realizar la obra, la donó a la iglesia, autorizándole asimismo su venta en caso de necesitar dinero. Fue inaugurada el 18 de julio de 1997.